La carne de Retinto, unión entre tradición y calidad

A diferencia de otras carnes, como la de Wagyu o de Angus, la de retinto es 100% autóctona y se es conocida por su excelente calidad.

Todos hemos oído hablar de esas razas bovinas que ofrecen una carne excelente, en su gran mayoría de origen japonés, canadiense, escocés… sin reparar en que en nuestro país tenemos una auténtica joya culinaria: la carne de Retinto.

En grandes pastos ubicados en su mayor parte en Andalucía y Extremadura (aunque también en Castilla la Mancha o Castilla y León) se crían las reses de Retinto. Su producción se diferencia en varios ámbitos de otras razas. Uno de los puntos que marcan la diferencia con respecto a la cría de otras razas es su situación de libertad, creciendo en extensos campos, a diferencia de la producción intensiva y en naves como se realizan en otras fincas. Otro de los puntos en los que destaca su carne es la alimentación de las reses: pastos, arbustos, ramas o bellotas son algunas de los alimentos con los que la Raza Retinta se nutre, garantizando la calidad que genéticamente ofrece esta raza autóctona española.

No solo la alimentación de este animal hace de su carne una joya culinaria, su morfología o su resistencia también  influyen en el resultado final. De frente amplia, cuello fuerte y corto pero bien musculado y una buena masa, el bovino de retinto resiste a los duros cambios de temperaturas en zonas con grandes diferencias térmicas entre el verano y el invierno, además de ser muy resistentes a los parásitos y enfermedades que otras razas pueden sufrir en esas condiciones. Es por esto que antes de su producción para carne y a la mecanización del campo se usaba para trabajos en la tierra, aprovechando su dureza y resistencia.

Y, por último, su carne excelente, roja, tierna y de grano fino. Esta carne ofrece un gran número de posibilidades en el ámbito culinario. En el caso de la parrilla por ejemplo, se recomienda tanto el lomo, como el solomillo o el costillar. Pero en el caso de los guisos o cocidos, la contra, la espaldilla, la aguja, la aleta, carrillada y rabo son las mejores opciones.

Como se puede ver, la carne de retinto es un producto que no tiene nada que envidiar a otros con fama internacional. Excelente sabor, consistencia y de origen 100% autóctono, es una excelente opción para los paladares exigentes y, por supuesto, para nosotros.